Ocho de cada diez niños y adolescentes le roban horas y calidad al sueño, lo que castiga su atención, su memoria y su capacidad de resolver problemas.
La calidad y horas de sueño, aefun los expertos, está perdiendo enteros en favor de los teléfonos móviles y las nuevas tecnologías.
Entre el 76,1% y el 91,2% de los estudiantes -de media ocho de cada diez- confiesan tener problemas para dormir y, lo que aún es más peligroso, hasta un 15%, uno de cada seis, asegura que no tiene horario regular alguno para echarse a la cama en los días de colegio.
Link a la noticia completa aquí